Política

Alberto Fernández propone un acuerdo de precios y salarios

Tendría una vigencia de 180 días y lo pondría en marcha en caso de ser electo Presidente. Apuntaría a recomponer el poder de compra de los sueldos. Se trata de un acuerdo social que considera clave para iniciar un eventual mandato.

El candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández dará hoy el primer paso para instrumentar un acuerdo social, una herramienta que considera clave para enfrentar la crisis en el inicio del próximo mandato. Se reunirá esta tarde, en Tucumán, con el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, y con Héctor Daer, uno de los jefes de la CGT.

La cita tripartita servirá de ensayo para la implementación de un acuerdo de precios y salarios por seis meses, una propuesta en la que el candidato opositor viene trabajando desde el inicio de la campaña. «Lo primero que hay que hacer es parar la pelota y eso significa ponernos de acuerdo entre todos para que durante 180 días podamos recomponer salarios sin que esto signifique un aumento de la inflación», dijo Fernández anteayer, en una entrevista con Joaquín Morales Solá, en TN.

En el entorno del candidato explican que la propuesta apunta a recomponer de manera paulatina la pérdida de 20 puntos de poder adquisitivo que sufrieron los salarios desde diciembre de 2015. Remarcan que debe hacerse en el marco de un acuerdo con los empresarios para evitar que esos incrementos de sueldo terminen licuados por un aumento de la inflación.

«No es un congelamiento de precios. La idea es que se moderen los aumentos de precios, en especial los de la canasta de alimentos, y que los salarios le ganen a la inflación«, explican desde las oficinas de Fernández. «Hay que subir el salario real de manera paulatina y con cautela, para evitar que haya saltos en el nivel de inflación», había dicho en julio Matías Kulfas, uno de los referentes económicos del candidato presidencial.

En este y otros encuentros, Fernández insistirá ante los empresarios en la necesidad de resucitar el consumo interno como receta para reactivar la economía. Les propondrá que ellos colaboren en mejorar el poder adquisitivo de los empleados del sector privado, mientras él se encarga de recomponer los ingresos reales de jubilados y trabajadores estatales.

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