Fiscalización de la provincia trasladó siete monos Tití que permanecían en el ámbito doméstico

Los controles se realizaron en cercanías de la localidad entrerriana de San José y se inspeccionaron un importante número de autos particulares y vehículos como camionetas y camiones en virtud de la Ley Provincial de Caza N°4.841 y la Ley Nacional de Conservación de la Fauna N°22.421, respetando los protocolos de trabajo establecidos ante la actual pandemia de Covid-19.

Esta tarea se realiza con el fin de encontrar elementos que orienten a la detección de casos como son los de caza furtiva, tenencia ilegal de productos o subproductos de animales silvestres y/o tráfico de fauna silvestre.

Rescate de monos Tití

En otro orden de operativos, la Dirección General de Fiscalización de la provincia participó en el traslado de siete monos Tití que permanecían en el ámbito doméstico.

La persona que los cuidaba en la localidad bonaerense de Villa Ballester, convocó a autoridades nacionales quienes a través de la Brigada de Control Ambiental iniciaron el traslado de siete ejemplares de mono Tití penacho blanco que habitaban en un domicilio de dicha localidad.

De esta manera la señora entregó de manera voluntaria a los monos Tití (Callithrix jacchus) entre recién nacidos y ejemplares adultos, que cuidaba en su casa desde hacía un año y medio, tras haber rescatado dos monos en mal estado, les dio buenas condiciones de permanencia y alimentación. En el período en el que permanecieron con ella, la pareja de primates tuvo cría en tres oportunidades.

A pesar de encariñarse con ellos, la señora reconoció que por tratarse de animales exóticos no pueden ser considerados mascotas, y además al realizar la entrega pidió a la ciudadanía “no fomentar el comercio ilegal de fauna silvestre”, “este tipo de animales no son para jugar”, “necesitan estar en libertad”, sostuvo.

Los monos fueron trasladados al santuario animal fundación Tekove Mymba a aproximadamente 20 kilómetros de la localidad entrerriana de Colón.

Al llegar al lugar fueron recibidos por personal de la Dirección General de Fiscalización de nuestra provincia, donde junto con los funcionarios nacionales y personal perteneciente a la fundación, se los introdujo a su nuevo hábitat de aclimatación con características que garantizan el bienestar animal.

Posteriormente se realizó la inspección y fiscalización conjunta del establecimiento en sus aspectos generales, instalaciones, ambiente y de su inventario de especies.

El director general de Fiscalización de la provincia, Manuel Maza señaló que “estamos convencidos que esta forma de trabajo articulada entre áreas que comparten objetivos de cuidado de la fauna y recursos naturales -a nivel provincial como nacional-, es de gran importancia por la sinergia que se logra, y dejando como resultado controles más eficientes”.