Seis horas de “carrera” por la vida

El Triatlón, es el evento más importante que tiene la Ciudad. Sin dudas es la marca que nos representa a nivel nacional e internacional, pero que a medida que pasan los años, lamentablemente va decayendo. El Triatlón, ya no es el mismo de años atrás. Ya no tiene la mística de esos gloriosos años cuando La Paz recibía triatletas de Japón; EE.UU; Canadá y otros competidores de distintas partes del mundo que tenían en su agenda la fecha del evento como un compromiso a cumplir si o si. Se puede decir que el mal estado del circuito, (en el que la organización nunca invirtió un peso) haya sido el punto clave para que se pierdan clasificaciones; entonces, esos corredores olímpicos dejaron de venir y solo se mantiene con nivel internacional por un grupo conocido de triatletas uruguayenses.

Lo mantiene la política. Cuándo un evento es mantenido por la política, pese a ser una organización cerrada, a la cual nunca se le conocieron los números de ingresos; a donde se destina el dinero que se recauda, etc., claramente empieza a decaer.

La política le da los auspicios; Turismo de la provincia; Turismo de la Ciudad. La logística es puesta por el municipio; de allí se desprende el trabajo de la Dirección de Tránsito; de Obras y Servicios Públicos; del Staff de Turismo y otras Áreas municipales que trabajan tres días exclusivamente para esta fiesta. En tanto, toda la cobertura de salud también viene por la parte pública y esto fue el detonante que dejó al descubierto “la mala organización” del evento más hermoso y popular que tiene La Paz.

¿Quién se hace cargo; la política o los organizadores?

Si el gobierno pone el 80 por ciento para que el Triatlón se realice. Por qué Turismo no absorbe el evento y se hace cargo de la organización para que no ocurran situaciones como la que padeció la familia de la bebé de 6 meses que no pudo ser derivada a Paraná debido a que todas las ambulancias estaban destinadas al evento.

O por qué no se privatiza para que el equipo de salud sea privado, por ejemplo.

Ayer, una mujer desesperada, pidiendo ayuda a los gritos. Ya que la vida de una persona estaba en juego mientras toda la cúpula política estaba enfocada en la carrera.

Nadie lo sabía. Hasta que la tía de la bebé se allegó hasta el puerto a pedir auxilio.

“Mi sobrina ingreso convulsionado pasado el medio día”, contó Fernanda Godetti.

“La llevamos a la clínica, nos dijeron está convulsionado llévenla al hospital porque la bebé no tiene obra social”, dio cuenta Fernanda. Y aquí la odisea para salir de la ciudad. La desesperación y la impotencia de una mujer que pedía llorando por la vida de su sobrina.

Llamó al 101 para pedir que la dejen pasar. Le dio los datos de su auto para avisar que iba con su sobrina con convulsiones.

Y se estremece el relato; “Llegamos, (al hospital), ella tenía su lengua para atrás, las enfermeras la arrebataron de los brazos y corrieron no con ella. Le pusieron oxígeno salió del cuadro de convulsiones. Para esto cabe destacar que ya habíamos llevado la derivación de la clínica firmada por el pediatra. Estaban todas las ambulancias en el hospital  aprontándose para salir al puerto o lugares designados para el tria”, cuenta Fernanda.

La vieron los médicos, le pusieron medicación. Teníamos la derivación en la mano. “Cargaron su personal a las ambulancias y se fueron todas. Todas”, relató.

Mi sobrina volvió a repetir el cuadro. Pero ya no quedaban ambulancias. Para esto todavía no había pediatra que la vea en el hospital. Salí desesperada al puerto a pedir que nos manden una ambulancia. Una enfermera nos dijo afuera y había mucha gente escuchando, no la van a llevar todavía porque están todas las ambulancias afectadas al tria. Es por eso que me fui hasta ahí para ser escuchada…

La Viceintendente, Stella Wensel logró que una ambulancia se dirija al hospital pero el director del nosocomio no ordenó la derivación y la bebé volvió a descomponerse.

Relata Fernanda; Llamé a la vice intendente, ella llamó al director y éste no le respondió. “Cuando fui al puerto llegó al hospital a los 5 minutos. Pero no solucionó nada. Solo dijo, “ya la va a ver el pediatra; Ya va a venir”…

Al rato llegó el pediatra. El sabía que no había ambulancia, así que dijo todavía no la voy a derivar.  La dejaron ahí y se fue. Mi sobrina vuelve a convulsionar. Pero todavía no terminaba a el triatlón. Llegó el chófer de la ambulancia, porque era urgente sacarla ya pasadas las 18 hs. Pero todavía no llegaban las ambulancias. Había chófer. Había urgencia pero las ambulancias estaban en el triatlón. Ahora que está terminando y se desocuparon salió la ambulancia con las luces prendidas y sirenas. Con oxígeno hasta Paraná. Con una mamá desesperada. Porque la bebé convulsionó desde el medio día. Pero el tria nos dejó sin ambulancias. “Y está es la historia de la loca que se apareció en el puerto pidiendo auxilio se muere mi sobrina”… concluye Fernanda Godetti.

Seis horas tuvo que esperar una bebé de 6 meses para ser derivada al hospital San Roque. Seis horas desesperantes para una familia que sufría cada segundo. Un director que sigue siendo incapaz y un sistema de salud decadente. Una gran deuda que la política tiene para con el departamento La Paz.

Muchas gracias Triatletas; vecinos de La Paz por hacer que el Triatlón siga vigente. No es culpa del evento. No es el TRIATLÓN, sino quienes lo organizan…

De la redacción de Infopaer.